domingo, 23 de febrero de 2014

Huir...

Salir corriendo, sin mirar atrás... Que nada te detenga y nadie te impida marcharte. El miedo a ser olvidado, a no significar nada,  a ser tan solo uno mas... No te quedes por huir del olvido, solo sentirás vacío y desasosiego en las largas noches en las que tus pensamientos danzan al compás del reloj, resonando en cada rincón de tu mente. Cuando sientas que no puede más... llegó el momento. Llena tu maleta de recuerdos, de momentos maravillosos, de sueños incompletos y perfectos... Decide el camino que tomar y a caminar. No temas no ser recordado... de ser así has tomado la decisión correcta. Nadie merece estar a tu lado si no te añora cuando faltas...

Tan sencillo como caminar. Pasito a pasito, y sin mirar atrás...

domingo, 16 de febrero de 2014

Efímero...

Lo peor de todo es no poder conservar aquel momento.

Recurrir a él cuando las fuerzas empiecen a flaquear... Saber que siempre estará. Que algo tan insignificante y pequeño se convierta en algo tan grande y sea capaz de alegrar tus días tristes. 
Sin embargo, no se puede retener, ni recurrir a él cuando lo necesitas. Llega sin avisar, cuando menos te lo esperas. Silencioso.

Y esa incertidumbre en su llegada te mantiene alerta, nunca sabes cuanto tiempo pasará hasta sentirlo de nuevo.


Tal vez lo que lo hace tan bello y tierno es que sea efímero.

lunes, 10 de febrero de 2014

Las partes del todo.

Piezas muy pequeñas que conforman el todo... cada una aporta algo y por muy insignificantes que puedas parecer cumplen su función. 

Prueba a quitar una de ellas. 

Aparentemente no pasa nada, no es así. Esa pieza deja un hueco, un vacío muy pequeño, pero que no deja de ser un vacío. Quita otra y tendrás otro vacío... y así hasta acabar con el conjunto. 

Y por muy absurdo o raro que pueda parecer quitar una de todas ellas supone destruirlo  todo. Porque cuando una cae, todas las demás caen con ella, se necesitan unas a otras y no soportan alejarse...

Cuida cada fracción antes de perder todo.