viernes, 22 de junio de 2012

Un mal recuerdo.

Desaparecer y fundirte en el olvido. Que nadie recuerde lo que fuiste. La soledad te acecha y no puedes huir. 
Olvido, soledad, tristeza, desamparo... 
La luz desaparece quedando sombras a tu alrededor. Toda la grandeza se ha perdido, bastaron unos instantes. Adios felicidad... Las sombras y la soledad se acercan para compadecerse de tu tristeza, saben lo que llega ahora... 
Una lágrima brota de tus ojos, una lágrima llena de dolor. La soledad y las sombras te acompañan. No busques salida en el mañana, ellas seguirán contigo, han venido para quedarse. No esperes a que amanezca para que el sol llene tu vida de alegría... 
Confusión, soledad, tristeza, desamparo, angustia, dolor... 
Tu recuerdo pasará con los años, se olvidará el dolor y la tristeza. Soledad y sombras buscarán otra compañía y tu serás algo del pasado. 



Un mal recuerdo...


domingo, 29 de enero de 2012

Despertar

Por la persiana puedo ver la luz entrar, pequeños halos de un nuevo día se cuelan para quedarse en este diminuto cuarto donde sólo había cabida para la oscuridad y la soledad.
Ahora puedo distinguir las formas de aquellos muebles escondidos tras las sombras, juguetosos al fingir ser lo que no son.
Un nuevo día que empieza como todos los demás. Me encuentro en la cama, boca arriba, puedo verlo todo a mi alrededor. Me despierto y todo es igual... la misma mesa, la misma silla, el mismo cuadro... en el mismo sitio de siempre. La esperanza que albergaba se desvanece... nada ha cambiado. Los zapatos siguen donde los dejé, y el jersey que me quité anoche se quedó sobre la silla. Rutina, nada cambia.
Me levanto y dejo que la luz que esperaba impacientemente junto a mi ventana pase arrasando con todo. Mis ojos luchan contra tanta luz, los pies con el frescor que la noche le ha cedido al suelo...Ya ganadas las batallas me dirijo a mi rutina. 

















  


Y todo para comenzar un nuevo día...

martes, 24 de enero de 2012

Odio

Ahora eres tú quien llora, ahora soy yo quien puede reír, sin embargo no lo hago. 
Mi corazón desea estallar en mil carcajadas mostrando todo el odio y rencor que ha ido acumulando, pero aún así mi corazoncito solidario cierra con llave la puerta de los sentimientos negros. 
Y sin desearlo me acerco a tí, ahora soy yo quien puede reir, sin embargo no lo hago.
Sin ordenarlo mi mano tiende un pañuelo para que seques esas lágrimas. Mi corazoncito solidario vence todo el odio. Y sin yo quererlo me siento a tu lado con miedo de que me recrimines todo lo que ocurrió en el pasado. 
Silencio...silencio... 
De nuevo vuelve el rencor y mi solidario corazón se retira derrotado del campo de batalla, las tropas del odio se encuentran en la frontera... no cruzan.
Ahora soy yo quien puede reír, sin embargo no lo hago.
Me levanto y te dejo con un pañuelo lleno de lágrimas y el tormento de un mal recuerdo... 

No olvides que formé parte de tu vida...